La camionera asturiana, una nueva víctima de la violencia de género

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La víctima de este nuevo caso trabajaba conduciendo su camión por toda España y Europa.

Camión MAN

 

Un nuevo caso de violencia machista ha sucedido en casa de Y.M., que vivía en una segunda planta de un edificio de la travesía Mohíces, parroquia de La Caridad, municipio de El Franco, Asturias. La víctima que ha sido asesinada por su propio marido, en la vivienda familiar y con sus hijos en ella. Varios vecinos se lamentan ahora de no haber actuado al oír algunos de ellos comentarios vejatorios y machistas como, por ejemplo, “vete a la mierda” del hombre dedicados a la mujer, en varias ocasiones.

Todo parece indicar que este nuevo caso de violencia machista fue completamente planificado, pues el hombre fue visto la noche anterior por varios vecinos accediendo al interior del edificio en plena madrugada llevando las cuerdas con las que, tras matar a su mujer, se colgaría pocas horas después.

Los hijos de ambos estaban en casa en el momento en que todo sucedió. Los vecinos habían escuchado últimamente, también, los llantos de los pequeños en numerosas ocasiones, propiciados por las acaloradas discusiones que mantenían sus padres. Sin duda, una desgracia que los dos pequeños hayan tenido que presenciar el terrible trato que el padre dio a la madre hasta que la asesinó, con 29 años.

Los vecinos de la pareja, acostumbrados a oír gritos a menudo, no dieron más importancia cuando aquella noche empezaron a escuchar una nueva discusión. Sin embargo, algo cambió. Tras algunas palabras, se oyó un golpe y fue cuando se decidieron a llamar a la Guardia Civil para contar lo que pasaba en la casa. Pero fue demasiado tarde.

Uno de ellos vio colgado el cuerpo sin vida del hombre cuando se asomó por la ventana de la vivienda. Minutos antes se escuchó un ruido en la parte alta del edificio, era el hombre que había subido hasta allí para rodear su cuello con una cuerda y quitarse la vida. La mujer, en cambio, había sido degollada con un arma blanca. Mientras, los niños estaban en sus habitaciones.

Este caso de violencia machista es ya el trigésimo primero del año en nuestro país, que sigue siendo un problema sistémico que ya cuenta con 872 asesinadas por sus parejas o exparejas entre los años 2013 y 2016.