Dmitry Sotnikov ha terminado en segundo lugar, mientras que Gerard de Rooy celebra su tercera posición.
El piloto ruso Eduard Nikolaev, acompañado por sus compatriotas Evgeny Yakovlev y Vladimir Rybakov (Kamaz – Master) se ha hecho con la medalla de oro del Dakar en la categoría de camiones, gracias a un tiempo total de 41 horas, 1 minuto y 35 segundos. Mientras que la medalla de plata ha sido para el también trio de rusos Dmitry Sotnikov, Dmitrii Nikitin y Ilnur Mustafin (Kamaz – Master), y la de bronce para Gerard de Rooy, acompañado por Darek Rodewald y el catalán Moisès Torrallardona (Petronas Team de Rooy Iveco).
En las demás categorías, el piloto catarí Nasser Al-Attiyah (Toyota Gazoo Racing SA) se ha hecho, por tercera vez en su carrera, con el triunfo del Dakar en la categoría de coches, consiguiendo el español Nani Roma (X-raid Team) el segundo lugar. En la categoría de motos, Toby Price (Red Bull KTM Factory Team) ha ganado, mientras que el argentino Nicolás Cavigliasso (Drag’on Rally Team) lo ha hecho en la categoría de quads, y Francisco López (South Racing Can-Am), en la de SXS.
El camino del ganador Nikolaev hasta la final no ha sido nada fácil. El Rally Dakar 2019, que se ha celebrado del día 6 al 17 de este mes de enero en Perú, ha desafiado a los participantes, que han tenido que recorrer 5.000 kilómetros sobre arena, principalmente. Esta competición es una de las aventuras más difíciles que se conocen, aunque la satisfacción que invade a los pilotos cuando termina la última etapa hace que el reto valga la pena.
La edición número 41 del Rally Dakar empezó con una primera etapa cronometrada entre las ciudades peruanas de Lima y Pisco. A parte de este primer recorrido, los participantes han tenido que superar nueve etapas más, completando un total de diez. El equipo Petronas de Rooy Iveco consiguió colocar a tres de sus Powestar en las cuatro primeras posiciones de esa primera y corta etapa. Sin embargo, Eduard mostró sus intenciones desde el primer momento, pues ya terminó primero el primer día de competición, con un tiempo de 1 hora, 9 minutos y 5 segundos.
No obstante la dureza de la segunda etapa dejó atrás la primera como un simple calentamiento para empezar el reto de una vez por todas. La etapa, que contó con 342 kilómetros, terminó también con Nikolaev en el primer lugar del podio, mientras que de Rooy y Sotnikov lo completaron. La tercera etapa también exigió un gran esfuerzo a todos los participantes, pues el recorrido se caracterizaba por tener muchas alteraciones de terreno, además de tener que aguantar los pilotos las altas temperaturas que se dieron durante el día.
La competición siguió durante las etapas siguientes con algunos incidentes para olvidar como, por ejemplo, el momento en el que el ruso Karginov atropelló con su camión a un espectador –sufrió una fractura en el fémur–, por lo que el jurado de comisarios decidió expulsarlo de la competición. Sin embargo, quitando alguna actuación desafortunada, lo cierto es que el Dakar ha sido ejemplo de lo que es la sana rivalidad y el verdadero compañerismo.
Durante los últimos kilómetros del recorrido, Nikolaev demostró ser el justo vencedor del Dakar, pues se convirtió en el protagonista del recorrido ya desde la salida. Aunque no lo tuvo fácil, puesto que sus rivales supieron bien como contraatacar, el campeón supo reaccionar con una fantástica victoria en la etapa nueve, que le dio el liderato para llegar a la última etapa con suficiente confianza como para defender su primera posición hasta el final.