El Grupo Volkswagen acelerará el ritmo de su amplio proceso de reestructuración bajo el liderazgo de Herbert Diess.
Tras un exitoso 2017 y el buen arranque de este 2018, el Grupo Volkswagen se ha propuesto acelerar el ritmo de su transformación, gracias a la puesta en marcha de un nuevo programa. Así, Herbert Diess, consejero delegado del Grupo, ha declarado en la Junta General Anual de Accionistas de Volkswagen Aktiengesellschaft que “el Grupo Volkswagen está en muy buena forma tanto desde un punto de vista operativo como financiero. Nuestra estrategia está empezando a ganar impulso. Estamos abordando de forma sistemática los principales retos de la automoción del futuro. Sin embargo, aún nos queda mucho camino por recorrer. Los años cruciales de nuestra transformación todavía están por llegar”.
A medida que se incrementa la velocidad de los cambios en la industria del automóvil, la reestructuración del Grupo, basada en la Estrategia 2025, necesita recibir un impulso incluso mayor. “En este aspecto, Volkswagen debe volverse más honesta, más abierta y más sincera. En otras palabras: debe convertirse en un ciudadano corporativo modélico”, ha subrayado Diess.
Según el consejero delegado, el éxito económico sostenible tan solo es posible con una cultura corporativa sana. Por ello, la principal prioridad del Grupo ha sido sentar las bases para crearla. “Necesitamos estructuras, procesos y programas robustos. Pero, sobre todo, también necesitamos actuar de forma coherente. Además, de respetar las normas y acatar la ley, la clave siempre será la ética, una brújula moral clara”, ha explicado Diess. Además, se deben evitar casos de conducta deshonesta, algo que hasta hace poco en Volkswagen se habían dado demasiados. “Hacer que esto cambie es la máxima prioridad, tanto para mis compañeros del Comité Ejecutivo como para mí personalmente”, ha añadido.
Uno de los objetivos del plan que ya sigue Volkswagen es ampliar todavía más su sistema interno de denuncias. La compañía también reforzará la organización de compliance para hacerla aún más profesional. Y, además, pretende seguir mejorando las estructuras y los procesos, focalizando el programa en integrar de forma permanente un comportamiento ético en la cultura corporativa.
Según el consejero delegado, “el buen gobierno corporativo también incluye la asunción de responsabilidades y la penalización de las malas conductas, así como una comunicación transparente”.
Herbert Diess también aprovechó la oportunidad brindada por la Junta General Anual para explicar a los accionistas el futuro desarrollo de la estructura directiva del Grupo. “Volkswagen debe actuar más rápida, sistemática y eficientemente, tanto a la hora de tomar decisiones como a la hora de ponerlas en práctica. En otras palabras, debemos transformar el Grupo para que pase de ser un superpetrolero algo difícil de manejar a convertirse en una poderosa flota de lanchas motoras”. En esencia, este nuevo modelo permitirá la creación de grupos de marcas que se organizarán en función del segmento de clientes o de la gama de precios.
