El gigante de la distribución Lidl será el primero en probar el nuevo camión autónomo y eléctrico de la firma sueca Einride, denominado T-Pod.
En el camino hacia la electrificación es vital que las compañías trabajen de la mano. Ejemplo de ello es la nueva asociación entre el gigante de la distribución Lidl y el fabricante Einride. Hace unos meses esta última compañía presentó un prototipo de camión autónomo y eléctrico con un diseño realmente curioso, de 7 metros de largo y con espacio optimizado para 15 palets. Tras la firma de un contrato de colaboración será Lidl el encargado de probar las primeras unidades del Einride T-Pod en varios de sus centros de la región sueca de Halmstad.
Esta cooperación es positiva para ambas empresas. El T-Pod, un camión eléctrico totalmente silencioso y con autonomía para 200 kilómetros, recibe el empujón necesario por parte de un conglomerado a nivel mundial mientras Lidl se asegura que el modelo sostenible su futura flota 100% eléctrica cuente con un modelo hecho a medida. Los camiones cero emisiones y autónomos van un paso más allá en la reducción de costes operativos para las grandes compañías ya que, además del ahorro en combustible, pueden llegar a prescindir del conductor.