Madonna versus Tutankamon o Scania versus Volvo
Ya se sabe que algunos sienten auténtica pasión por personalizar sus camiones y llevados por dicha pasión algunos empiezan por añadir unas lucecitas. En una fase posterior llega eso de si cromamos alguna llanta y, claro, terminas invirtiendo dos o tres veces el importe de adquirir un tren de carretera de 60 toneladas y 25,25 metros de longitud en redondear algunos detallitos.
Madonna on Tour
No se trata de la próxima gira de la megaestrella pop, sinó de la decoración elegida por el último vencedor en el Nordik Trophy sueco. Estamos hablando del impresionante tren de carretera del transportista finés Ristimaa, que ha transformado un conjunto estirado por un Scania 6×2 R 560 en un espectacular homenaje a Madonna.
Aunque esto resulta evidente a centenares de metros de distancia, pues la estrella del pop ocupa los laterales de su inmenso remolque y carrocería del camión, donde el homenaje adquiere una dimensión más sorprendente es en el interior de esta cabina monoplaza.
Salimos a escena
El interior de la cabina del Scania R 560 Topline de Ristimaa es algo así como un cruce entre cabina de camión, de la cual apenas mantiene invariable el puesto de conducción y el asiento del conductor, con un camerino de estrella de rock. Donde en un camión convencional aparecería la cama aquí tenemos un sofá de
espectacular diseño, el panel trasero no puede definirse más que como un pequeño escenario donde cualquier asiduo de los Karaokes sería feliz desgañitándose como un poseso. El ambiente se completa mediante focos y altavoces que ocupan absolutamente todo el espacio disponible en techo, panel trasero y puertas… En definitiva
un Scania poco habitual, que no se nos presenta precísamente como el más confortable para el descanso, pero donde nos podríamos sentir como una auténtica estrella del rock. Es más, si alguien se anima incluso cuenta con vitrinas donde se exponen algunos vestidos al estilo Madonna…
El volvo FH 16 Globetrotter de los faraones
Pues sí, por increíble que parezca, pero lo cierto es que un transportista sueco, Ralf Ekdahl, ha transformado un tren de carretera Volvo FH 16 750 en un sorprendente homenaje a Tutankamon y Nefertiti, pese a que a priori Suecia y Egipto se nos adivinan dos lugares tan alejados como el Polo Norte del Valle del Nilo. El resultado de
nuevo no puede ser más sorprendente y es que lo único que le falta a este conjunto de 8 ejes es que al abrir las puertas de su inmaculada carrocería encontremos un auténtico sarcófago con momia incluida. Eso sí, los de Ekdahl se lo curran al máximo y es que a la personalización de su Volvo FH 16 de última generación le añaden la caracterización del personal propio al aire del antiguo Egipto, con alfombras, cachimbas para fumar y toda la parafernalia que debería acompañar a cualquier miembro de la corte faraónica que decidiera recorrer las carreteras escandinavas del siglo XXI.
De este modo si en algún viaje te toca una descarga en algún lugar cercano al círculo Polar Ártico y de repente en el horizonte ves aparecer el poderoso ojo del dios egipcio Horus… Tranquilo, los kilómetros no te han afectado el cerebro. ¡Simplemente te has topado con la reencarnación camionera nada y nada menos que del faraón Tutankhamon!