Scania lanzó el motor de gas de 13 litros durante el pasado Ecomondo, un propulsor de 410 CV y 2.000 Nm de par máximo que se convierte en el aliado de la rentabilidad.
La evolución tecnológica y mecánica ha tomado un ritmo estrepitoso en los últimos años, con especial urgencia en todo lo relacionado con la conservación del medio ambiente. El sector de la automoción y el transporte se han convertido en la diana de Europa y escándalos como el dieselgate llegan en el momento oportuno para que la presión para los fabricantes sea todavía mayor. Ante tal desafío los responsables de Scania, como parte del Grupo Volkswagen, se apunta al carro de la electrificación pero con los matices impuestos por su esencia de transporte de larga distancia. De aquí a que Elon Musk haga realidad su camión eléctrico de sobrada autonomía y mientras las marcas tradicionales investigan sobre su viabilidad, los europeos han decidido optar por la sostenibilidad del gas natural y ejemplo de ello es el lanzamiento del nuevo motor de 13 litros de Scania.
El bloque de gas OC13 se presentó oficialmente en el pasado Ecomondo como muestra indiscutible de la implicación de Scania en la mejora de la calidad del aire. Este propulsor de ciclo Otto, con bujías y combustión estequiométrica (completa), ha sido desarrollado de cero aprovechando la base modular del 13 litros existente por lo que la calidad de sus componentes está probada, del mismo modo que la fiabilidad, el stock disponible y el conocimiento por parte de los técnicos de mantenimiento. La creación de este motor es una pista de la confianza que deposita el fabricante en el gas con una inversión que no vaticinan temporal. “El gas natural es un combustible que ha llegado para quedarse, desde Scania no lo tomamos como una opción de transición para el transporte de larga distancia” comentaron los responsables.
El OC13 es un motor de seis cilindros que rinde 410 CV y que cumple, obviamente, con la normativa Euro 6 e incluso la supera con creces. Gracias a su par máximo de 2.000 Nm desde las 1.100 rpm hasta las 1.400 rpm, puede utilizarse tanto en el transporte de larga distancia como en modelos de construcción y obra. Esta maquinaria va ligada siempre al cambio automatizado de Scania por lo que su conducción y confort no supone cambio alguno para el conductor más allá de la ausencia del ruido motor, una ventaja más para el transporte urbano.
Esta solución admite tanto GNL (Gas Natural Licuado) como GNC (Gas Natural Comprimido) cada uno con sus ventajas y desventajas. La opción licuada cuenta con más estaciones que lo suministren, a pesar de que desde GASNAM aseguran que añadir el surtidor de GNC no es demasiado caro, pero también ofrece una mayor autonomía. Con el GNL se consigue recorrer hasta 1.100 kilómetros con el típico semirremolque mientras que para la opción comprimida se reduce a 500 kilómetros. A nivel general escoger el motor OC13, o cualquier otro de gas de la marca (280 CV y 340 CV), supone un ahorro que hasta ahora no ha podido certificarse pero que se centra en el precio del combustible (un 50% menos en la gasolina y un 30% en el gasoil). Ante las variaciones del coste del barril de petróleo, el gas se muestra más estable y económico gracias a la menor imposición gubernamental, un aspecto que según los especialistas de GASNAM siempre será mejor que el de cualquier combustible tradicional.
A pesar de esa reducción del coste el comprador deberá tener en cuenta dos aspectos: que los intervalos de mantenimiento de un motor con principio Otto son más cortos y que, por ahora, la compra de una variante a gas es de un 20% a un 30% más cara que un diésel. El intervalo se ha establecido sobre los 45.000 kilómetros para el cambio de bujías y de aceite, un dato que ha mejorado notablemente frente a los 30.000 km de los primeros modelos a gas de la marca. Ya se admiten pedidos del nuevo 13 litros a gas de Scania y por ahora no han querido confirmar el desarrollo de nuevos motores con mayor potencia.
