Tractora de la serie de construcción Renault Trucks K y una grúa Hiab 377.
Lo más atrevido
TSME, empresa especializada en el transporte, movimiento y elevación de todo tipo de maquinaria, se atreve con todo y el nuevo modelo que han incorporado lo demuestra. La nueva grúa se trata de una Hiab 377 que alcanza los 28,5 metros en horizontal y cerca de unos 30 en vertical. A pie de camión, su capacidad llega a las 6 toneladas. Lo destacable de todo esto es que estará integrado en una tractora Renault Trucks K 6×4 con una potencia de 520 CV, gama y vehículo dedicados a la construcción que destaca por su robustez. Dicha tractora, está adaptada a las especificaciones de exige y requiere TSME, que transformaran en un vehículo rígido. Esta transformación se está potenciando cada vez en la compañía más para ofrecer un producto más versátil.
Características del nuevo vehículo
Esta tractora podría definirse como una mezcla entre un vehículo de obra y uno de carretera. En cuanto a la configuración, han escogido una versión más compleja a nivel de tracción para que el vehículo pueda acceder a sitios de determinado acceso. Va equipada con doble chasis para asegurar su mayor rigidez, ejes delanteros, escapes en vertical que permiten ganar espacio en cuanto al chasis y, por último, incorpora todos los sistemas de seguridad y emergencia correspondientes de la marca. La tractora en sí tiene unos 6 metros de longitud, que gana un poco más si se transforma con los estabilizadores. Además, la grúa funciona toda por radiomando: con la nueva normativa, los montajes se hacen mediante pruebas de estabilidad que indican el momento de vuelco, como montar, etc. Con el cual también garantiza un control de seguridad y equilibrio.
Para pequeños y grandes trabajos
Este vehículo puede actuar en zonas tan complicadas como el centro de Barcelona como transportar mercancía de gran volumen. Por ejemplo, según nos explicó Joan Mérida, director de TSME, ahora están llevando a cabo una gran operación de transporte de compactores de reciclaje. «Vamos a trasladar una fábrica desde Guipúzcoa a Zaragoza con unas prensas de 60 toneladas», indicó.
Otro ejemplo de gran trabajo el traslado de un módulo que se trasladará hacia Madrid, entonces a Bilbao, luego a Londres y volverá de vuelta a Barcelona. Sin duda, un equipo que está preparado para ello. En cuanto a trabajos pequeños, también hay vehículos pequeños. Y uno de ellos es la minigrúa. Mérida resaltó que están trabajando mucho con este tipo de grúa, un producto que en el mercado ofrece mucha «versatilidad». Con ella, acceder en sitios más complicados, como parkings, estaciones y otros lugares, es posible y más sencillo para realizar ciertas tareas. Afirma que con este vehículo, los costes bajan muchísimo. Además, la minigrúa es híbrida y les da la posibilidad de trabajar tanto en gasolina como en eléctrico.
¿Futuro con combustible alternativo?
Como bien se sabe, el tema medioambiental en el transporte y muchos otros ámbitos es primordial. Aunque esta nueva unidad no funcionará con combustibles alternativos, aseguran que les gustaría presentar próximamente una unidad más ecológica. «Nuestro 90% del trabajo es en área metropolitana y esto hace que el trabajo ecológico sea mucho mejor«, matizaba Mérida. Por otro lado, la marca de grúas Hiab sí que ha empezado a desarrollar un sistema eléctrico para los camiones grúas. Una opción que resalta el director de TSME es el gas. «Quizá no tienes tanto ahorro a nivel funcional, pero te permite la flexibilidad de no tener una dependencia de la electricidad. La parte positiva es que reduces emisiones y consumo», defiende.
¿Y qué sucede con las marcas? Considera que aún no están preparadas a aplicar estas energías con vehículos medios y grandes. En cuanto al gas natural, por lo que han podido evaluar, el vehículo perdía mucha potencia y con la grúa no se podía trabajar. El tema de las energías renovables y eléctricas es un asunto que cuesta de inculcar en el sector, pero también tienen en cuenta los elementos que dificultan este paso. La pérdida de potencia es notable y los costes suben exponencialmente si se montara una grúa y sistema eléctricos. Mérida es partidario del sistema híbrido, que te permite depender de dos energías y utilizar una u otra dependiendo del entorno en el cual se trabaje. El sector servicios es muy imprevisible, y dependiendo de la maniobra y la actividad, una energía podría favorecer más que la otra. Pese a las dificultades de dar el paso a los combustibles renovables, están más cerca de conseguirlo.
